Senderismo por la ciudad romana de Lacipo
Sobre el promontorio conocido como El Torreón, coronado por una meseta alargada de orientación noroeste-suredes, de algo más de 300 m de longitud y 50 m de anchura media, a unos tres kilómetros al oeste de Casares, se ubican las ruinas de la ciudad romana de Lacipo.
Se trata de un oppidum que pasa a ser ciudad tras la conquista romana, llegando a emitir moneda propia. Su mayor esplendor corresponde a época republicana y augustea, aunque debió pervivir a lo largo de toda la época imperial. Las campañas de excavación desarrolladas en los años 1975 y 1976 por Rafael Puertas Tricas permitieron documentar un recinto amurallado con diversas estancias asociadas, dos aljibes, restos de un gran edificio de carácter público y una última fase de ocupación como necrópolis en época hispano-visigoda.
Su enclave resulta especialmente estratégico para controlar los valles de los ríos Guadiaro y Genal, así como vía de comunicaciones con los asentamientos del interior.
Lacipo fue inscrito como monumento en régimen de Bien de Interés Cultural en 1985 y todo el entorno protegido como Zona Arqueológica desde 1996 (BOE número 172, de 17 de julio de 1996).
Senderismo por Lacipo
Existen varias formas de acceder a la ciudad romana de Lacipo, siendo la más fácil la que sigue el carril de 2,5km situado frente al diseminado de La Laguna, en la carretera A-377 entre Manilva y Gaucín. Se trata de un itinerario de media dificultad que discurre por un paisaje en el que se aprecian los olivos centenarios que tienen su origen en la ocupación romana de este lugar. Hay que desviarse del carril al pie del cerro sobre el que se ubica Lacipo, junto a un abrevadero, cuando el camino sigue por un sendero que da acceso a la cima.
En la parte alta del cerro, los restos emergentes de la ciudad afloran en distintas zonas, siendo la más espectacular la situada en la parte norte, por lo colosal de los sillares ciclópeos con los que está hecho el conocido popularmente como Torreón. Las vistas desde aquí permiten entender el carácter estratégico de esta localización y por qué Lacipo fue el lugar desde el que se articuló la ocupación de todo el territorio situado al este del río Guadiaro, entre los siglos I a.C. y I d.C.